viernes, 4 de julio de 2008

VENCIDOS


Vencidos


En su cansino vagar
Siempre de adelante atrás,
El péndulo marca su curso
En el ángulo agudo
Trascurren los segundos
Y las horas se amontonan.

Con infinita paciencia
Las agujas juegan al pillar
Una detrás de la otra,

En su bagaje estelar, el Sol,
Va cayendo en la pendiente
De otro día intrascendente,
Acabada su vigilia
Y acuchillando celestes,
Se va sangrando en el horizonte,
El día ya desfallece,
Los cielos de alumbre oscurecen
y el Sol se muere en la tarde.

El tiempo se cicla candente
Sigue cayendo la arena,
El cielo sereno lo entiende
La luz tornasola el sentido,
Y solo un cuco mecánico
Nos va cantando la ausencia.

¡Ay amor!
De carburos ojos verdes
¡Ay espuela!
Que te clavas y me dueles
¡Ay lujuria!
De bocas y de cuerpos
¡Ay premura!
Que te ahogas en la ausencia
Ay lamento, que tormento,
Si en tu silencio no te tengo.

Con las claras del día
Sigue el péndulo impenitente
Avanzando en el espacio
Y cayendo intransigente
En los torbellinos labios
De un amor inexistente.

Va Quijano a galope
En busca de los molinos de viento,
Que tormento,
Pero que delicia de locura,
¿Quién la cura?........

1 comentario:

  1. Me ha encantado este poema tan cargado de cansancio, de desesperación, de nostalgia, de angustia, de hastío asfixiante, en que el tiempo interminable aprieta la garganta, sedienta de cambio, de dicha...

    He descubierto tu rincón virtual navegando por este océano de locuras que es Internet...

    Un placer encontrar espacios como el tuyo en este cibermundo tan saturado de mediocridad...

    Un saludo

    ResponderEliminar