jueves, 25 de septiembre de 2008

Cartas a Rosa 3


Cartas a Rosa 3

En el crepúsculo de la tarde, me invadió el silencio,
En la acritud del alma, se encendió una luz,
En la trasparencia luminosa, apareciste tú.

Hace tanto tiempo que mis manos enhebran versos,
Y ansían la caricia de tus besos.

No por el simple hecho de dos labios conexos,
quizás nos influya la sensibilidad en la escritura,
al abrazar con las palabras los sentimientos,
o es en my una terapia de la paternidad que nunca tuve
y te reconozca en mi subconsciente como mi niña,
no lo creo, pero sería bonita la escusa para un loco poeta.

Quizás porque quise domar el impulso y la rabia que fluye
por tus venas, y apaciguar en un remanso creativo, la paz de los espíritus.

Lo más seguro sea que eres torrente y como rio, me haces sentir vivo, en algún meandro te desbordas y anegas mis riberas, me siegas y alimentas.

A veces te estancas en un remanso de plata, y con el agua te fusionas; Y otras veces te escancias y corres cantarina salpicando el ímpetu de tu alma.

Quizás sea porque derramas esencia de pasión por los poros, insaciables de tu corazón inalcanzable y al mismo tiempo desvalido, avaricias el mismo eco consumido.

Quizás sea que eres como la ola que me impulsa y me lleva, me alza y me eleva, me llenas de espumas, y unas veces amaino en tu playa y otras me estrello en el rompiente.

Quizás por el retrato que construyes frente a las cosas, y dejas el dibujo indeleble de tu alma para ti sola y el discurso en tu silencio.

Quizás por tu imagen luchadora que devora tu existencia.

El caso es que sin verte sé quién eres.
Sin tocarte estoy en lo más profundo de tu adentro.
Sin oírte encuentro tu voz en las moléculas del aire.

Te acaricio con el tacto de las sabanas mientras duermes,
Te beso a la mañana con el agua clara,
Y respiro a tu lado en tu ansia.

Porque soy el tiempo que te vive,
Y te contengo en el pensamiento,
soy parte de tu materia.

Estoy dentro de los bucles de tu pelo,
en alguna parte de tu iris escondido,
en el tacto de tus dedos,
en la rabia de tu adentro,
en esta locura introvertida,
en esta estrategia incomprendida.

Somos distintos e indisolubles,
pero nuestras almas hace tiempo que se unieron,
aunque no lo admitan nuestros cuerpos.

En el crepúsculo vacio de la inconsciencia,
vaga tu mirada y mi sentimiento,
encarcelados en una fragancia
va contaminando el aire
en los anacronismos del tiempo.

Tic… Tac… tic… tac… fusilanime eco,
Sin evitarlo, sin pretenderlo
¡Como te quiero!

2 comentarios:

  1. wooo, precioso Julio. Pues si, me sorprendiste.
    besitos amigo.

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  2. Julio:
    Yo, me quito el sombrero ante este torrente de palabras. Es tremendo cómo quieres a esta niña.(Por un momento, la envidié).

    Un beso.

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